Verdades Que Mienten

Cada vez más convencidos del poder que tenemos en nuestras manos y que tan pocas veces lo utilizamos para combatir lo que al pueblo le hace mal, hoy podemos festejar, aunque sea un poco, por el gran triunfo popular (se estaban juntando 100.000 firmas para destituirlo y haciendo marchas y conferencias en contra de su designación) ante la renuncia de Jorge "Fino" Palacios, ayer, a la conducción de la policía de Mauricio Macri y ratificar el pensamiento genuino de un país que quiere mirar adelante sin perder de vista lo que pasó años atrás.

El tan cuestionado policía dejó su mando alegando motivos personales, desgastado por las constantes agresiones, como si contar la verdad fuera agredir. Por supuesto, el Jefe de Gobierno no dudó a la hora de seguir defendiendolo y tirándonle flores: "Fue un gesto de grandeza que lo enaltece. Ha querido no complicar la gestión de gobierno ni entorpecer el nacimiento de algo central para los vecinos, como es la nueva policía". Como si fueran pocos semejantes halagos, agregó que la Ciudad "ha perdido un gran elemento". Recordamos que Palacios fue y es duramente criticado desde el primer momento en que Macri lo anunció como jefe de la nueva policía metropolitano. ¿Por qué?

1-Sospechado de haber sido partícipe del encubrimiento del atentado terrorista en la AMIA (1994);

2-Involucrado en la masacre del 20 de diciembre de 2001;

3-Echado de la Policía Federal Argentina por sus vínculos con los reducidores de autos en el secuestro de Axel Blumberg;

4-Justifica el terrorismo de estado en su libro "Terrorismo en la Aldea Global" (ver nota relacionada).

5- Formó parte de la policía genocida en "Coordinación Federal" durante la última dictadura militar.

Creo que no se necesita mucho más para que el pueblo le diga que NO. Duro revés para la gestión PRO. La cara de Macri mientras transmitía la dimisión lo decía todo.

No pudieron callar la voz del pueblo. Los medios de incomunicación que trataron de tapar todo no diciendo nada sobre el caso o, peor aún, comentando que hubo cortes que complicaron el tránsito en la Ciudad cuando en realidad se hacían marchas en contra de Palacios y la Unidad de Control del Espacio Público (U.C.E.P.), también sufren el golpe porque los medios independientes junto con todos lo que pusieron su grano de arena logramos que se haga público. Imaginense si tuviéramos esa tan ansiada nueva Ley de Radiodifusión todas las cosas que se pudieran contar para que se entere la gente.

Aca estamos de pie, celebrando una victoria que no será del todo gratificante si nos quedamos con esta renuncia y nada más.

En todo este tiempo que Palacios fue el jefe de la metropolitana, no estuvo quieto. Fue colocando hombres de su confianza a cargo de las direcciones e institutos de formación de la nueva policía (que tantos espacios públicos nos están quitando: espacios verdes, polideportivos municipales, jardines de infantes -sí, jardines de infantes-, etc.). No debemos dejar que maneje a la policía a su antojo, sin exponer su cara ni ensuciarse más.

La lucha, ahora, se planta en otra plataforma y hay que ir por más: la disolución de la metropolitana y de la U.C.E.P., la patota que impuso Macri para "limpiar" la Ciudad y de la que ningún medio de desinformación masiva habla de cómo trabaja (Nota en Página/12 - Nota en Perfil).