Nueva Violación a los Derechos Humanos en Myanmar

Antes de comenzar, conozcamos un poco de este ignoto país:


Myanmar, ex Birmania (los militares, que derrocaron al anterior Gobierno de facto en 1989 tras una revuelta que pedía la apertura del país, modificaron el nombre a pesar de que fue y es rechazado por opositores por considerar que no tenían autoridad para hacerlo) está ubicado en el Sudeste asiático y limita al norte con China, al sur con el Mar de Andamán, al este con Laos y Tailandia, y al oeste con la India, Bangladesh y el Golfo de Bengala. Tiene alrededor de 60 millones de habitantes, eminentemente rural, y con una de las esperanzas de vida más bajas de la región (61 años). Está gobernado por una Dictadura Militar –de las más brutales y que menos respetan los Derechos Humanos- desde 1962 y la última vez que se celebraron elecciones parlamentarias fue hace 18 años (1990) cuando la actual Junta perdió de manera abrumadora ante la Liga Nacional para la Democracia. Ante tales eventos y sin concesión alguna, el Régimen ignoró los resultados, continuó con su tiranía y arrestó a líderes opositores como la Premio Nobel de la Paz Aung San Suu Kyi (aún hoy con prisión domiciliaria). Después de 17 años, en el 2007 la Junta Militar se vio afectada por masivas protestas dirigidas por monjes budistas en protesta por el alza del precio de los alimentos en un país ya empobrecido por un muy bajo nivel de vida y que fueron brutalmente reprimidas.


Ante la gran catástrofe natural ocurrida en el país asiático los días 3 y 4 de Mayo pasados, producido por el ciclón Nargis, que dejó hasta el momento más de 100 mil muertos, más de 200 mil desaparecidos y, según cálculos de la ONU (Organización de las Naciones Unidas), entre 1.200.000 y 1.900.000 de personas afectadas (aunque desde algunos medios de “desinformación” y desde el Estado digan que las cantidades son mucho menores), el Gobierno Militar que conduce el destino de Myanmar afirma que no necesita ayuda para facilitar y distribuir eficazmente los alimentos y la asistencia a las víctimas que se le ofrece desde distintos países y organizaciones. Pero agencias de la ONU, observadores independientes y trabajadores de agencias locales e internacionales de ayuda humanitaria se muestran cada vez más preocupados por el progresivo deterioro de las condiciones que sufren cientos de miles de personas desplazadas por el ciclón.La Junta Militar no sólo no ha facilitado las visas a expertos en ayuda humanitaria sino que en un acto totalmente demagógico, no ha dejado ingresar las remesas de asistencia sin antes pegar sobre las cajas fotos de los Generales a modo de promocionar al Gobierno que realizó un polémico referendo constitucional, aprobado extrañamente por la mayoría de la población, y que se jacta de haber puesto año (2010) para las elecciones generales (la nueva Carta garantiza 25% de los puestos parlamentarios a los militares y dispone que el eventual presidente civil deberá entregar el poder a las Fuerzas Armadas en caso de emergencia).

El mismo Ministro de Planificación Nacional y Desarrollo Económico, U Soe Tha, afirmó ante los periodistas que los trabajadores de las agencias internacionales de ayuda no eran necesarios y, según el periódico oficial New Light of Myanmar, declaró: "Aceptamos la ayuda de todas las naciones, pero de su distribución pueden encargarse las organizaciones locales". El hecho de no dejar que sean las Agencias Internacionales las que hagan el reparto puede suponer la entrega parcial o nula de la ayuda o que no sea proporcionada a quienes más lo necesitan.
Mientras continúan las demoras en el suministro de ayuda internacional a Myanmar, la organización de ayuda humanitaria Amnistía Internacional “ha instado a los dirigentes de los Estados asiáticos, que se encuentran en mejor posición para influir, a presionar a las autoridades militares del país para que emprendan acciones de inmediato con el fin de abordar una catástrofe humanitaria que se agrava cada día. Cree que, al bloquear deliberadamente una ayuda para la supervivencia, el gobierno de Myanmar puede estar violando el derecho de sus ciudadanos a la vida, a los alimentos y a la salud”."El tiempo es fundamental para salvar vidas", ha dicho Mika Kamae, presidente del Foro de Asia y Oceanía de Amnistía Internacional en Hong Kong.
Se teme por grandes epidemias, desabastecimiento, desnutrición y más muertes en Myanmar si la imposición del Régimen dictatorial sigue vigente tras “el más devastador desastre natural en el sudeste asiático desde el tsunami" (en diciembre de 2004 con epicentro en el océano Índico, cerca de Indonesia, que mató a 230.000 personas en doce países), según Laura Blank, vocera de la organización World Vision. Según Amnistía Internacional “las autoridades tienen la obligación legal de respetar y defender sus derechos a la vida, la alimentación y la salud hasta el máximo de los recursos de que dispongan y, cuando sea necesario, dentro del marco de la cooperación internacional".








Fuentes de Información:
www.amnesty.org/es
www.clarín.com (6 y 12 de mayo de 2008)
es.wikipedia.org/myanmar

Videos:
Fotos:
Gentileza de Clarín.com y Wikipedia.org

3 comentarios:

  1. Mariana says

    Muuuyyy interesante!. Ahora con esto te puedo decir q los Argentinos somos muy afortunados apesar de todo!!.
    Besossss


    Tania says

    muy claro y explicito tu post! ahora digo...me hace recordar a cierto regimen que padecimos por estos lados...deberian saber estos "señores" que tarde o temprano todo llega. Tambien creo que me gustaria mas firmeza por parte de la ONU para casos tan extremos, siempre quedan los paises mas pobres fuera de toda ayuda y son los que mas la necesitan, no me refiero a la material... un abrazo!


    helen says

    me ayudo pila! por que tengo que hacer un trabajo sobre la violacion de los derechos en este pais
    sin embargo , tendran algunas imagenes de las que me `pueda valer para justificar ?


Publicar un comentario